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Hace unos días, el Gobierno de Pedro Sánchez anunció que tenía previsto
subir a 900 euros mensuales el salario mínimo interprofesional, en virtud
del acuerdo presupuestario para 2019 alcanzado con Podemos. Desde entonces,
las reacciones de todo tipo no se han hecho esperar. Pero la cuestión que
más interesa es la siguiente: ¿cómo afecta esto a los trabajadores? En
este artículo te lo explico.
¿Cómo afecta la subida del salario mínimo interprofesional a tu nómina?
Hace unos días, el Gobierno de Pedro Sánchez anunció que tenía previsto subir a 900 euros mensuales el salario mínimo interprofesional, en virtud del acuerdo presupuestario para 2019 alcanzado con Podemos. Desde entonces, las reacciones de todo tipo no se han hecho esperar. Pero la cuestión que más interesa es la siguiente: ¿cómo afecta esto a los trabajadores? En este artículo te lo explico.
Contenido de este artículo:
- ¿En qué consiste esta subida del salario mínimo interprofesional?
- Las repercusiones en la subida del salario mínimo interprofesional
- Consecuencias negativas de la subida
Como a nadie le amarga un dulce, es evidente que a todos nos gusta que nos suban el sueldo. Y más aún si la subida es del 22%.
Si algún colectivo necesita de verdad un aumento salarial es el de los trabajadores que cobran los sueldos más bajos, ya que actualmente su poder adquisitivo es tan bajo que en muchos casos ni siquiera pueden acceder a préstamos al consumo con los que resolver una urgencia o un gasto extraordinario.
Por eso la decisión del Gobierno de incrementar el salario mínimo interprofesional hasta los 900 euros ha sido recibida con una mezcla de alborozo, incredulidad y algo de escepticismo.
¿En qué consiste esta subida del salario mínimo interprofesional?
El salario mínimo interprofesional es un índice legal que indica a los empresarios cuál es el límite mínimo a partir del cual no pueden pagarle menos a un trabajador
Esto quiere decir que en España ningún empleado con un contrato de 40 horas podrá cobrar una cantidad inferior a la estipulada en el salario mínimo interprofesional que se fija por ley cada año.
En el año 2018, la cuantía de este salario mínimo es de 735,90 euros al mes (14 pagas).
Y según lo expresado por Pedro Sánchez, la previsión es que para el año 2019 este SMI aumente un 22%, alcanzando la cifra de 900 euros al mes (con 14 pagas).
Las repercusiones en la subida del salario mínimo interprofesional
Los trabajadores directamente afectados por esta subida (en el caso de que finalmente se apruebe en estos términos) son los que menos cobran de los trabajadores en activo.
Este grupo lo forman el 3,5% de los afiliados a la Seguridad Social, que a grandes rasgos suponen algo más de medio millón de trabajadores.
Para este colectivo, el impacto de la subida será muy positivo ya que hasta ahora ni siquiera cobraban un sueldo mileurista.
Y es que con un salario mensual de algo más de 700 euros es muy complicado cubrir las necesidades básicas.
Por esa razón, en algunas ocasiones, para llegar a fin de mes, este tipo de trabajadores no tienen más remedio que recurrir a la ayuda de amigos y familiares, o a la solicitud de minicréditos sin nomina.
Sin embargo, el resto de los trabajadores por cuenta ajena no verán incrementados sus ingresos proporcionalmente, debido a que los convenios colectivos en general suelen contemplar sueldos por encima del salario mínimo interprofesional.
La única excepción sería la de algunos convenios que establezcan sus tablas salariales en función del SMI.
Por ejemplo: si un determinado convenio garantiza el SMI + 3% a una determinada categoría profesional, los trabajadores adscritos a dicho convenio colectivo sí que verán incrementadas sus nóminas en la misma medida que lo hace el salario mínimo interprofesional.
Consecuencias negativas de la subida
Esta propuesta no ha sido tan bien recibida por empresarios y autónomos.
Las organizaciones empresariales consideran que una subida que no tenga relación con la productividad de los trabajadores implicará un aumento del paro, ya que muchas empresas tendrán que despedir a esos trabajadores que se benefician de la subida del 22%.
Una teoría con la que no está de acuerdo la ministra de economía Nadia Calviño, que ha asegurado que las subidas del SMI en contextos de crecimiento económico “no solo no se ha destruido empleo, sino que se ha creado”.
Las asociaciones de autónomos tampoco están contentas con este incremento, puesto que —además de tener que pagar más en sus cotizaciones a la Seguridad Social (una gran parte lo hace por la base mínimas, referenciada al SMI)— también verán aumentados sus costes laborales, en el caso de que tengan empleados con salarios bajos.
Este detalle nos muestra que en economía nunca llueve a gusto de todos.
